Hechos con variedades locales raras o no tan conocidas fuera de su comunidad (ni a veces dentro), te presentamos una selección personal de 10 vinos realmente interesantes de variedades casi desconocidas, algunas rescatadas hace poco prácticamente de su desaparición gracias a el empeño y esfuerzo de los elaboradores. ¿Las conoces? Siempre recomendamos probar cosas diferentes, si no lo sueles hacer, sal de tu zona de confort! Te estás perdiendo lo que hace tan amplio, diverso y rico al moderno panorama del vino. Los descubrimientos que harás merecen la pena.
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| Vinos de Viñedos Verticales (Sierras de Málaga) |
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| Tentenublo Los Corrillos |
1. La Jaén blanca es una variedad plantada sobre todo en el sur de la península ibérica, utilizada según diversas fuentes junto a la palomino en la elaboración de los vinos de Jerez, pero también se la localiza en denominaciones de origen como Montilla-Moriles o la Ribera del Guadiana. Si ya es no muy común en el mercado nacional habitual, encontrar un vino blanco elaborado con la Jaén, es ya mas difícil imaginar que un productor en Rioja un día decidiera embotellar un vino blanco con esta variedad entre otras. Hablamos de Tentenublo Los Corrillos del productor Roberto Oliván que además esta elaborado a la manera de un vino naranja, fermentando el mosto en contacto con sus pieles unos nueve días, para luego criarse sin maceración en barricas de castaño nada menos! Toma rareza. El resultado es un vino floral y acerado, que no deja indiferente a nadie.
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| Prapetisco, de Barco del Corneta. |
2. Seguimos esta particular colección de rarezas vitivinícolas con un tinto de Castilla y León, desde la bodega Barco del Corneta y realizado con la variedad juan garcía (en Portugal llamada mourisco), este Prapetisco desde Arribes del Duero. El vino en aromas es frutal (frutas negras), floral y ahumado con algunos toques especiados, herbáceo y agradable en su conjunto. Añadimos curiosidades como que esta es una bodega donde Beatriz Herranz realiza además de este tinto, otros vinazos blancos fascinantes en el municipio de La Seca, y donde no esconden que hacen vinos a contracorriente, lo cual les agradecemos y admiramos, enormemente. Gran trabajo.
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| Bat Gara Hondarribi Beltza |
3. Desde el País Vasco, una de nuestras bodegas favoritas de txakoli (bodegas Goianea), nos sorprendieron en este 2020 con un tinto hecho de la variedad hondarribi beltza en un 65% (tinta) y resto de hondarribi zuri (blanca). Rareza porque no debe haber muchas bodegas de txakoli que se marquen un tinto y encima un señor tintazo como este Bat Gara, un vino que pasó una crianza en madera de cerezo. Rareza porque la hondarribi beltza (que te sobrarían dedos de las manos para contar las hectáreas plantadas con ella en toda la comunidad) tradicionalmente suele ir también en los txakoli junto a las blancas en lugar de en tintos, y rareza porque esta variedad da en aromas y en boca entre otras cosas recuerdos vegetales (las célebres pirazinas) parecidos a los de la cabernet franc, ejemplo: pimiento verde. Nos ha encantado porque es complejo, muy bebible y agradable, y escaso: salen al mercado apenas trescientas y pico botellas.
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| Abadía de Poblet La Font Voltada |
4. La trepat es otra variedad de uva incomprendida en el mundo del vino a grandes rasgos, se utilizaba y utiliza para hacer cavas y vinos rosados pero tintos muy pocos o ninguno. Menos mal que en la D.O. Conca de Barberá vieron las posibilidades que tenía en tintos, con su frescura, ligereza y frutosidad, y han llegado a hacer verdaderos vinazos como este Abadía de Poblet, la Font Voltada. Aromas y sabores a frutos rojos en cantidad, a flores, a mermelada de cerezas, a licor kirsch, a lácteos, a minerales, pimientas y cueros. Si lo tuyo son exclusivamente los vinos con cuerpo muy robustos y sabores a madera en cantidad, aléjate de este vino, y quizás de casi toda la lista, o justo lo contrario, deberías empezar a abrir tu mente, este viaje se disfruta mucho.
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| Arcal, de Pedro Olivares |
5. Pedro Olivares es un mago del vino, un viticultor realmente interesante por lo que hace y lo que cuenta en su web. Con las ideas muy claras, huye del exceso de mercantilismo en el mundo del vino y por supuesto de los vinos homogéneos, parecidos, sin sorpresas. Amigo de lo ecológico y lo vegano, y de las elaboraciones raras, hace vinos en la Sierra de Segura, Jaén y en Bullas, Murcia. Nosotros probamos un vino blanco llamado Arcal, que es prácticamente un vino naranja pues pasó meses criándose con sus lías. En la añada 2017 llevaba un 80% de tardana, una variedad originaria de la Comunidad Valenciana, acompañada de un poco de moscatel de Alejandría y roussanne (variedad blanca típica del Ródano francés). La sorpresa es que en la añada 2019 este vino lleva muscat, pinot noir y pedro ximénez, es decir totalmente distinto. Nosotros alucinamos con lo bueno y sorprendente que fue aquel Arcal 2017 de carácter cítrico en aromas y boca (naranjas) y a la vez muy floral, casi un perfume. Recomendamos seguir a este productor y probar sus distintas elaboraciones porque no te vas a aburrir.
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| El Camaleón, de Viñedos Verticales. |
6. En las Sierras de Málaga hacen vinazos, ya lo creo, blancos y algún tinto como este El Camaleón (llamado así porque al parecer es visitante habitual el curioso saurópsido escamoso por los viñedos de esta bodega: Viñedos Verticales). Es un vino realizado con un 100% de la variedad tinta romé de la Axarquía, macera con sus pieles unos dos meses y se cría unos diez meses con sus lías finas. El resultado es un vino fresco, ligero, con frutos rojos y mineralidad muy bebible y disfrutable.
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| Estaladiña de Bodegas Mengoba. |
7. Por si teníamos pocas rarezas en esta lista, ahora toca un tinto de Bierzo pero no hecho de mencía, claro, en ese caso no estaría en esta lista, de lo que esta hecho es de Estaladiña (nombre en el Bierzo para la Trousseau de Jura francesa, que se encuentra en algunas comunidades de España bajo otro nombre y adaptada a cada clima y lugar. Ejemplos: en Galicia se la conoce como Merenzao, y en el vecino Portugal como Bastarda). Elabora Gregory Pérez, un francés afincado en el Bierzo. Y el vino es complejo, elegante, frutal y especiado. Salen unas quinientas botellas por añada tan sólo.
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| Tierra Fundida 1/1 de Vinos en Tándem. |
8. No podía faltar en esa lista un vino canario, grandes desconocidos para el gran público pero muy valorados y apreciados para los winelovers de toda España y el Mundo. Si hay variedades poco conocidas son las de mi tierra, la gran mayoría de origen histórico portugués. Uno de los vinos que más gratamente me sorprendieron en este 2020 fue el Tierra Fundida 1/1, de la bodega Vinos en Tándem un tinto hecho de negramoll y castellana negra tintas y además una blanca: la verdello. Los elaboradores Loreto Pancorbo y Gabriel Morales son apasionados artesanos del vino, gente enamorada de lo que hace, y se nota. El vino es un espectáculo de frutos negros, balsámicos (eucalipto), especias, cuero, minerales, intenso, profundo, equilibrado, muy complejo cambiando casi a cada sorbo cuando se va a abriendo y mostrando su amplitud.
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| Colección de monovarietales de la asturiana Bodega Vidas |
9 y 10. Para finalizar una bodega y dos vinos. Desde Cangas de Narcea, Asturias la Bodega Vidas, nos ofrece monovarietales autóctonos únicos como el 100 Montañas carrasquín o el 100 Montañas verdejo negro (de nuevo la trousseau de Jura adaptada a otra zona). Ambos son rarezas que merece la pena descubrir. El carrasquín es un vino complejo, con frutos rojos, especias, herbáceos, lácteos, fresco y vivo, muy agradable. Y el verdejo negro es un vino mineral y fresco, atlántico, y tiene aromas y sabores a frutos rojos, tostados, y chocolate. Dos sorpresas que recomendamos descubrir, y si no te has adentrado en el mundo del vino asturiano, esta bodega bien lo merece.
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| Carrasquín Cien Montañas. |
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